Adicto a Ti (+18)

Hola, nuevo relato. Este lo escribí en los descansos de mi trabajo espero que os guste. Todos están registrados

ADICTO A TI

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Dos días habían pasado desde que se había alimentado por última vez, ese día estaba desesperado así que decidió que se alimentaria de su última víctima, la cual dormía tranquilamente a su lado. Era una joven deliciosa, hacía poco la había conocido en un bar de mala muerte donde normalmente se alimentaba. Ella tenía un cabello rubio desteñido, era guapa cierto pero estaba desmadejada, él suponía que su chulo no la tenía mucho cariño.

La joven no llevaba ropa alguna solo la tapaba una sábana fina del hotel donde se encontraba, por el contrario él llevaba puesto unos pantalones cortos que se había agenciado. Suspirando, posó sus ojos sobre los pechos de la chica. Los tenía grandes y perfectos para él. Sonriendo alargó su mano hacia uno de ellos y lo apretó con energía haciendo brotar de los labios de la mujer un gemido de dolor. Continuó amasando el pecho hasta que el pezón se puso duro, fue cuando posó sus labios y con pasión tiró con fuerza de él, haciendo que ella se despertara y se quedara mirando al hombre con terror.

Dev, se acercó a su oído y le susurró unas palabras haciendo que la joven cerrara suavemente los ojos, dejándola en un estado durmiente, debía aprovecharse de ella en ese estado, luego la borraría la mente y por último la dejaría suficiente dinero para que dejara aquella vida.

Fue besuqueando su cuerpo hasta llegar al sexo de la mujer, al posar sus labios sobre él pudo oler con devoción que estaba excitada, las mujeres huelen de forma diferente que los hombres cuando se excitan y eso le gustaba mucho. Lamió con suavidad el clítoris de la mujer con movimientos exactos haciendo que de sus labios saliese un jadeo, la siguió excitando hasta notar como se humedecía, por fin podría alimentarse. En ese mismo instante clavó sus dientes en ella, arrancando un susurro mezcla miedo y deseo, comenzó a absorber sus nutrientes en este caso no solo sangre sino también excitación y algunas hormonas femeninas, un rato después dejó de chupar y selló la herida con su lengua.

Levantó la cabeza y despertando a la mujer la folló duramente hasta que ambos se corrieron a la vez, entrando y saliendo con agitación de ella casi desgarrando su vida, cuando acabaron él la cogió con suavidad y la borró esos últimos recuerdos de su cabeza, la dejó el dinero y se marchó de allí, saciado y con energía para otro par de días, pronto muy pronto tendría que escoger una nueva víctima…

 ¿Serás tú?